Los hedge funds y los private equity funds no son tan similares como se cree
En el entorno financiero, existen diversos vehículos de inversión colectiva que tienen el objetivo de que sus participantes obtengan beneficios según sus necesidades.
Entre los más conocidos, se destacan los fondos de cobertura (hedge funds) y los fondos de capital privado (private equity funds). Aunque suelen confundirse entre sí por el público general, lo cierto es que son muy diferentes y están pensados para distintos tipos de inversores.
¿Qué es un hedge fund?
Un fondo de cobertura o hedge fund es un vehículo de inversión diseñado concretamente para lograr un retorno positivo sin importar la tendencia general de los mercados financieros, aunque, claramente, esto no siempre pueda lograrse.
Uno de los puntos característicos de los hedge funds es que son gestionados libremente: su hedge fund manager o gestor principal puede comprar y vender casi cualquier tipo de activo y estructurar todo tipo de estrategia, de volatilidad, bajista, alcista, etc.
Tal como explica la propia Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés), “los fondos de cobertura no están tan regulados como los fondos mutuos y generalmente tienen más margen de maniobra que los fondos mutuos para buscar inversiones y estrategias que pueden aumentar el riesgo de pérdidas de inversión”.
Al tener menos restricciones que un fondo de inversión tradicional, un fondo de cobertura suele ser más rentable en el corto y mediano plazo, pero a cambio de un riesgo más alto. Por ejemplo, un hedge fund podría colocar todo su capital en acciones de una sola empresa. Si crecen, el retorno será sorprendente; si caen, la pérdida será devastadora.
¿Qué es un private equity fund?
A su vez, un fondo de capital privado o private equity fund es una compañía que les permite a inversores, de carácter natural o jurídico, de alto poder adquisitivo, invertir en acciones de empresas que no cotizan en bolsa.
En este caso, los recursos recaudados son tomados por las empresas que necesitan el financiamiento para que inviertan en sus negocios, se expandan, mejoren su situación financiera, etc.
La esencia de los private equity funds se vincula con la inversión más convencional: analizar los aspectos fundamentales de una empresa y asociarse a ella para obtener un beneficio en el largo plazo.
De acuerdo al Instituto de Finanzas Corporativas (CFI), “los fondos institucionales y los inversores acreditados suelen constituir las principales fuentes de fondos de capital privado, ya que pueden proporcionar un capital sustancial durante largos períodos de tiempo”.
Diferencias entre hedge funds y private equity funds
Aunque muchas personas confunden los fondos de cobertura con los fondos de capital privado, lo cierto es que conllevan importantes diferencias entre sí.
Objetivo y horizonte temporal
En primer lugar, tal como se comentó anteriormente, mientras que los hedge funds apuntan a vencer al mercado en el corto y mediano plazo, los private equity funds tienen una visión de varios años, o incluso décadas.
Los primeros quieren ganar dinero con los movimientos bursátiles sin importar si la tendencia es alcista o bajista. En cambio, los segundos apuntan a seguir la evolución y los ciclos de un conjunto de empresas.
Riesgo asumido
El riesgo de los fondos de capital privado dependerá de la clase de compañías en las que inviertan y de la fase en la que se encuentren las mismas. No obstante, en líneas generales, los peligros podrían ser menores dado que el horizonte temporal es de largo plazo, lo que reduce la volatilidad de los vaivenes financieros.
En cambio, como los fondos de cobertura realizan estrategias más cortoplacistas, están expuestos a una mayor fluctuación de precios y valores, aumentando radicalmente la relación riesgo-retorno.
Liquidez
Como las compañías en las que invierten los private equity funds no cotizan en bolsa, las participaciones son menos líquidas, lo que significa que es más difícil convertirlas en dinero disponible para ser utilizado.
Por su parte, si bien no todos los hedge funds permiten que los inversores entren y salgan bajo las mismas condiciones, suelen ser más flexibles por operar, principalmente, en mercados líquidos con oferta y demanda.
Participación societaria
Otra de las diferencias entre un fondo de cobertura y un fondo de capital privado es el nivel de participación en las empresas en las que invierten.
Normalmente, los hedge funds no apuntan a involucrarse en sus directorios para poder tomar decisiones y modificar sus rumbos, solo buscan aprovecharse del comportamiento del precio de sus acciones.
Sin embargo, los private equity funds sí suelen adoptar un rol activo en la gestión, ya que quieren lograr beneficios por los productos y/o servicios que las empresas brinden a la sociedad, como sucede con los “negocios convencionales”.
Estructura de inversión
Asimismo, la estructura de inversión de estos vehículos financieros es diferente. Por un lado, los fondos de capital privado realizan grandes apuestas en pocas compañías porque, como comentamos anteriormente, tienen el objetivo de involucrarse en su gestión.
Pero los fondos de cobertura simplemente compran la cantidad de acciones que sean necesarias para armar su estrategia, sin importar el porcentaje de participación. Nuevamente, lo que interesa son los movimientos de las cotizaciones del mercado secundario.
Los hedge funds y los private equity funds son muy diferentes entre sí, y están orientados a diferentes públicos, pero ambos buscan generar beneficios económicos para sus participantes.
Fuentes:
- https://www.investor.gov/introduction-investing/investing-basics/investment-products/private-investment-funds/hedge-funds
- https://corporatefinanceinstitute.com/resources/wealth-management/private-equity-funds/